Programas de outplacement, una tendencia que se fija en el final de un ciclo

Autor: María Alejandra Díez
Equipo Comunicaciones
Fecha de publicación: 13/06/2024

Las organizaciones prestan gran atención a su proceso de onboarding, es decir el cómo reciben a sus colaboradores una vez son contratados, pues es el momento perfecto para enamorarlos y que se embarquen en un camino de éxitos laborales junto a la empresa, sin embargo, el transcurso de un colaborador en ella tiene un fin, y es allí donde esta nueva tendencia se fija. El outplacement plantea brindar una experiencia positiva al colaborador en el momento que deja la organización.

Esta nueva tendencia pone al colaborador como uno de los clientes más importantes de las empresas y como un embajador que hablará sobre las experiencias dentro de ella. Entre las opciones que puede contener el programa de outplacement se encuentra:

• Apoyo emocional
• Asistencia para la transición laboral
• Acceso a recursos para ayudar a los empleados a encontrar nuevas oportunidades de empleo (cuando sea necesario).

Esta evolución refleja una mayor conciencia sobre el impacto de las decisiones empresariales en los individuos. Además, que refuerza la marca empleadora, fomentando la lealtad del equipo, la retención del talento y, todavía más importante, siendo generadores de confianza entre el colaborador y la empresa.

En conclusión, el ‘outplacement’ es la confirmación de la tendencia humanizadora de las organizaciones pues está alineado con el bienestar de los empleados y se convierte en un componente estratégico, al ser coherente con los valores organizacionales, demostrando el compromiso con el bienestar social y de quienes allí laboran de principio a fin.